Como os avanzábamos hace unos días, los niveles de calidad del aire disponible en cada espacio del colegio, en función de su uso, se realizan mediante la medición de la concentración de CO2 en el aire, como método directo de evaluación.
De forma altruista, un miembro de la comunidad educativa, con experiencia y conocimientos como prevencionista e higienista industrial, ha realizado la instrucción, en colaboración con la Asociación, que ha adquirido medidores de CO2 que puedan dar la pauta a aplicar en cada aula en función del tamaño, número de alumnos y posibilidad de ventilación.
Ya ha comenzado la medición de los distintos espacios, comenzando por el salón blanco, cuyas mediciones han sido muy positivas, seguido de la sala de conferencias (hoy aula) y seguirá por el resto de aulas con el objetivo de de identificar las pautas de ventilación más apropiadas en cada caso.
Gracias a este trabajo se podrá lograr, mediante la apertura de ventanas y puertas, una ventilación eficiente, que garantice la seguridad de alumnos y personal docente, minimizando la pérdida de eficiencia energética y confort térmico.
Queremos recordar que todo esto es posible gracias a la generosidad del tiempo dedicado por varias familias, así como por todos los socios que con su cuota solidaria anual permiten que desde la Asociación podamos continuar abordando proyectos para el colegio que benefician a nuestros hijos.